S?bado, 15 de junio de 2013

Las peñas celebran el centenario de la constitución del club

Los aficionados del Racing son como el tiempo. Capaces un día lluvioso y con el cielo plomizo de sufrir y desesperarse en la Junta de Accionistas y al día siguiente –ayer– brincar, bailar y disfrutar, con un sol radiante, en la celebración del centenario del club. Setecientos seguidores tomaron ayer el Huerto del Francés para homenajear los cien años que se cumplían desde que los fundadores del club firmaron el acta constitucional de la entidad. Un reconocimiento «al mejor equipo del mundo –dijo Colsa–, el Racing, el nuestro, el de aquí».

El Centenario diseñado desde la Asociación de Peñas (APR) tenía dos fechas marcadas en rojo en el calendario. El 23 de febrero y el 14 de junio. En la primera se rindió homenaje al primer partido disputado y en la de ayer, al registro oficial del Racing como club. En un acto celebrado en el domicilio del primer presidente, Ángel Sánchez Losada, suscribieron el histórico documento, junto a él, Mariano Zubizarreta, Carlos Iruretagoyena, José Roncal, Mateo Pérez, Regino Vela, Joaquín Sánchez Losada, Pancho Cossío, Álvaro Zubieta, Álvaro Flórez Estrada, José Solana, Vidal Gómez, Valentín Zubizarreta, Adolfo Torres, Julio Ojembarrena, Julio M. Gómez, Jesús de la Sierra, Diego Breñosa y Antonio Lavín.

Eran las cinco y media de la tarde cuando un grupo de niñas izó la bandera diseñada para la ocasión. Esa a la que le falta un trozo de escudo, porque los aficionados sienten que desde las oficinas les han robado una parte. Pero los hinchas cántabros ya están acostumbrados a sufrir por lo que sucede dentro y fuera del campo y, por eso, ante la inactividad del club, que no organizó ayer ningún acto, tomaron ellos la iniciativa.

El césped del Parque de Mesones se tiñó de verde y blanco. Mientras unos jugaban partidos, muy cerca del córner que recuerda una de las esquinas de los viejos Campos de El Sardinero, los más pequeños aprendían ‘racinguismo’ en dos carpas. Recortables, tejas para colorear y un cuadernillo donde se explica la historia del equipo más representantivo de Santander y de Cantabria. Niños, adolescentes y veteranos se dieron cita para recordar mil anécdotas. Ayer nadie se acordó que deportiva y económicamente el Racing se encuentra al borde del abismo. Era un día para celebrar y había ganas. Muchas.

«No penséis los tiempos complicados, disfrutad», pidió el presidente de las peñas durante su discurso improvisado sobre un pequeño templete. Seguro que el del Racing no ha sido un Centenario tan pomposo como el de otros clubes españoles, pero, sin duda, ninguno ha tenido una carga emotiva tan grande.

El ‘cántabro’ de Munguía

Las horas iban cayendo y nadie se quería ir. A las ocho estaba previsto el homenaje a Nando Yosu. El ‘cántabro’ de Munguía, el salvador del Racing en cuatro ocasiones, el ídolo de jugadores, entrenadores y aficionados. ‘Tus cien primaveras’, de Rulo, sonaba por la megafonía cuando todos los presentes comenzaron a gritar el nombre de uno de los mayores símbolos que ha dado el racinguismo. Ilusión en los rostros y aplausos con sentimiento. «A mi abuelo le hubiera gustado estar, se hubiera emocionado mucho», aseguró su nieto, Gorka, en su pequeña intervención. A su lado, el resto de la familia contenía la respiración. Bernardo Colsa y Pablo Rodríguez, de la peña Juventudes Verdiblancas, fueron los encargados de entregarle un cuadro conmemorativo, que seguro que colgará de una de las paredes de la habitación donde Nando lucha contra su enfermedad. Le podrá flaquear la memoria, pero lo que nunca olvidará son los colores de su equipo, el verde y el blanco.

«Hemos elegido a Nando Yosu porque encarna los valores con los que nos identificamos todos: entrega, pundonor, clase, solidaridad, arraigo, amistad, humildad, sacrificio, generosidad...», relató Colsa cuando fue interrumpido por los cánticos en honor a Yosu.

Con el corazón encogido, los racinguistas se dirigieron a contemplar el duelo de comedores de sobaos para coger fuerzas y poder levantar el ‘Mayu’. Un tronco de haya de 25 metros que horas antes había sido descargado de un camión. Vecinos de Tresviso, expertos en el izado –allí lo llaman ‘jovera’–, fueron los que lo organizaron todo. Un gran hoyo donde introducir la base y varias cuerdas para levantar el madero. Fue otro de los momentos que más atención concitó. Entre todos se consiguió levantar la enseña del racinguismo, con bandera del Racing incluida. «Plantarle el 14 de junio supone, por un lado, honrar al racinguismo pues es algo enraizado en el pueblo, que nace por el apego a unos colores que están muy dentro del corazón de los cántabros. Por otro, celebrar la fecha y, por último, por el deseo del racinguismo de vivir una nueva etapa marcada por los buenos deseos», explicó la APR.

La fiesta concluyó con un concierto de las bandas ‘Nel Tardíu’ y ‘Los Cuervos’.

Fuente: El Diario Montañés


Publicado por Castro2 @ 12:52 | 0 Comentarios | Enviar

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