El fútbol está lleno de tópicos. Uno de ellos es ese que suelen repetir con insistencia jugadores y técnicos cada vez que su equipo atraviesa problemas clasificatorios. «No miramos al futuro, preferimos ir partido a partido». Mentira. Los futbolistas, al igual que los aficionados y los periodistas, sacan la calculadora y hacen sus pronósticos. Esto no suele ser buen síntoma, pero es inevitable. La plantilla del Racing actualmente se encuentra en este trance. «Hay que conseguir al menos ocho puntos en los próximos cuatro encuentros ante rivales directos», reconoció ayer el centrocampista Andreu Guerao.
Perder ante el Recreativo ha supuesto un duro golpe en la línea de flotación del equipo. La derrota no fue abultada, pero hizo daño a los jugadores de Gay. Cortó su trayectoria y, lo que es peor, les hizo retroceder en el tiempo a la época donde la falta de criterio y de posesión eran la nota predominante. Por eso, los jugadores, como explicó ayer Andreu en la sala de prensa de La Albericia, no viven ajenos a la preocupación de sus seguidores. «Los futbolistas no solemos echar cuentas, pero nos somos tontos y sabemos por donde pasan las posibilidades de salvación». En este sentido, el futbolista catalán tiene claro que el siguiente bloque de partidos que tienen por delante, es vital en las aspiraciones de salir de la zona de descenso donde actualmente se encuentran. Mirandés, Murcia y Xerez deben pasar por El Sardinero y además deben visitar el campo de Los Pajaritos, en Soria. Por eso, la plantilla -como explicó Andreu- se fija conseguir, como mínimo, «ocho puntos». En caso contrario, el equipo podría estar desahuciado.
Para conseguirlo deben, sobre todo, recuperar el estilo de juego que desplegaron ante el Huesca y demostrar que lo vivido en el Nuevo Colombino el pasado fin de semana fue sólo un espejismo. «Debemos salir más mentalizados; y fuera de casa debemos hacerlo como cuando jugamos en El Sardinero», reconoció Andreu, el jugador que ayer se erigió en portavoz de la plantilla. A pesar de ello, el centrocampista reconoció que en el vestuario «tensión no hay», a pesar de que el resultado de Huelva les dejó tocados, incluido a su entrenador. El planteamiento del encuentro del preparador madrileño no ha pasado desapercibido en las altas esferas del club, que no están nada contentas con su actuación en la capital andaluza y, además, con los novedosos planes de entrenamiento que ha traído su preparador físico de confianza, David Pérez.
Por eso, Gay deberá recuperar el sábado ante el Mirandés la posesión del balón, que en Huelva fue prácticamente inexistente. Andreu, el jugador llegado para hacer eso precisamente, fue el que más lo sufrió. «Debemos encontrar el equilibrio, no podemos olvidarnos del balón e ir a rachas», puntualizó. Además, a su entender, «cuando tenemos la pelota, creamos ocasiones de gol». Ante el Mirandés, el Racing tendrá una nueva oportunidad para revertir la situación, además, en un día especial como es el cien cumpleaños del equipo, algo que en principio no debe añadir más presión. «Para mí, particularmente, es una motivación y para el equipo, creo, tampoco es un inconveniente», aseguró Andreu.
Los internacionales, en casa
La plantilla se ejercitó ayer en doble sesión, a excepción de Juanmi, Sotres y Jairo que estuvieron concentrados con la selección española sub-20 y jugaron un encuentro, que perdieron, ante el Castilla. El delantero malagueño fue titular y el cancercbero y el centrompista también disfrutaron de minutos. Regresaron por la tarde y hoy harán un entrenamiento individual. Tiago Pinto y Óscar Perez no se ejercitaron por distintas molestias.
Fuente: El Diario Montañés