El Racing de Santander no justificó el coste de las actividades que realizó en 2006 y 2007 con base a la subvención directa que el Gobierno de Cantabria le concedió en el año 2005.
Así lo observa el informe del Tribunal de Cuentas sobre los ejercicios presupuestarios 2006 y 2007 en Cantabria, recogido por Europa Press.
En ese documento también se indica que, al menos esos años, no se produjo ninguna reunión de la Comisión de Seguimiento del Racing, que debía mantener como mínimo un encuentro anual para analizar la marcha de ese acuerdo.
El 30 de enero de 2006 se suscribió un convenio de colaboración entre el Gobierno de Cantabria y el Racing para la promoción deportiva, que establecía una subvención directa de dos millones de euros anuales entre los años 2006 y 2016.
Es un convenio, no obstante, que este año no se ha abonado, pues se ha incumplido una de las condiciones que deben cumplir todas las entidades que reciben subvenciones, y estar al corriente de pagos con la Agencia Tributaria, a la que el club deportivo, en concurso de acreedores, debe dinero.
El convenio se enmarcaba en las deudas que el club mantenía con Caja Cantabria, por valor de 17 millones de euros.
Lo que hizo el anterior Gobierno, a través del CEP (la Coordinadora de Empresas Públicas) fue intervenir y comprar la marca comercial Real Racing Club de Santander y la cantera, cifrando esos activos en 17 millones de euros, que se vendieron a una empresa privada para que los titulizara (transformara en un valor de mercado).
Para la devolución, la CEP pagaría dos millones anuales a la firma, cifra que el Racing también pagaría a la CEP, a través de la subvención concedida para los siguientes once años.
Tal y como fue redactado, el convenio se justificaba en la promoción de Cantabria a través de la actividad del Racing, y también en que al ser la única sociedad deportiva de fútbol en primera división -en ese momento, ya que esta temporada descendió a Segunda-- participando en competiciones profesionales, lo que, además, justificaba que no se sacara la subvención a concurso.
La ayuda se materializaba en cinco actuaciones: el apoyo al deporte base, facilitación del acceso gratuito a los partidos a estudiantes, la colaboración en la promoción exterior de Cantabria, la facilitación de la participación de los jugadores y técnicos en actos divulgativos y el apoyo a las actividades de promoción deportiva organizadas desde el Gobierno de Cantabria.
En ese convenio se establecía la justificación, para cada anualidad, del cumplimiento de los compromisos a los que se obligaba el club, con la declaración de las actividades financiadas y su coste, y con el desglose de cada uno de los gastos incluidos, que se presentarían al finalizar cada ejercicio.
En la misma línea, el acuerdo establecía la creación de una comisión de seguimiento para definir las actuaciones concretas de colaboración, que se reuniría, como mínimo, una vez al año.
Asimismo, se solicitaron las cuentas de los primeros tres ejercicios económicos (2004-2005, 2005-2006 y 2006-2007), y la documentación que justificara el cumplimiento de los compromisos adquiridos por el club.
El Tribunal de Cuentas respalda en su informe que la subvención se concediera de forma directa y no por concurso, al cumplirse los motivos alegados de que fuera la única sociedad en Primera División.
No obstante, este órgano de fiscalización realiza una serie de objeciones sobre el seguimiento y la justificación de la ayuda.
Así, advierte de que no quedó constancia de que la comisión de seguimiento se reuniera en los años analizados, cuando el convenio decía expresamente que debía producirse una reunión cada año.
Sí que se aportaron las memorias justificativas, con lo que sí que se considera que se realizaran las actuaciones para las que se otorgó la subvención.
Pero pese a ello, el club no determinó el coste concreto de esas actividades, ni el desglose de los gastos incluidos, ya que lo que se aportó fue una relación de gastos "genéricos" que no pueden vincularse "de manera clara" con las actividades subvencionables.
En el informe, el Tribunal de cuentas llama la atención sobre que en el certificado de la reunión del 29 de diciembre de 2005 del Consejo de Administración de CEP Cantabria (la sociedad que coordinaba el conjunto de las empresas públicas) en la que se aprobaron las condiciones de financiación de la compraventa de las acciones del Racing, pero sin que se incluyera en ese certificado información sobre la finalidad concreta del préstamo avalado.
Fuente: Europa Press