Mar Hernández, la jueza de lo mercantil que tutela el concurso de acreedores del Racing, está más que enfadada con los últimos acontecimientos en el club santanderino. Las escenas de violencia que vio toda España el pasado domingo y la falta de seriedad demostrada por Alí, Pernía y compañía la tienen más que predispuesta a cortar por lo sano.
Si a la mascarada del mes de diciembre respondió con una fulminante suspensión de facultades del Consejo de administración, ahora está, desde la misma mañana del lunes, valorando con su equipo la posibilidad de convocar con carácter de urgencia una nueva Junta general de accionistas. La dimisión de Toño Gorostegui (lo mismo que pasó hace cinco meses) y la falta de comunicación de los recién elegidos tanto con ella como con el propio club no han hecho más que reforzar su idea inicial. De hecho los cuatro extranjeros aun no han aceptado el cargo.
Para poder tomar esa medida basta con que un accionista (solo uno ya es suficiente) solicite al juzgado, en base a los incidentes de la última Junta, la celebración de una nueva en la que se elija, otra vez, un Consejo de administración. Si ella se decide a dar el paso, bastaría con publicar el anuncio y esperar un mes. Es decir, se llegaría justo al 30 de junio. ¿Que harían entonces Alí y Pernía?
Fuente: As