Los administradores concursales siguen confiando en el denominado triunvirato para continuar hasta final de temporada. Ayer, el director general de la entidad Antonio Corino trasladó -a través de EL DIARIO MONTAÑÉS- a Alejandro Alvargonzález, Santiago Ruiz Asenjo y Ramón Camarena la decisión de cambiar o no al actual cuerpo técnico. Sin embargo, ellos lo tienen claro y siguen apostando por el actual. De hecho, ambas partes se reunieron en los Campos de Sport de El Sardinero. Tras una larga charla, Ruiz Asenjo trasladó el cariño y la comprensión a Juanjo, que a su vez dijo sentirse capacitado y motivado, tanto él como sus ayudantes, para sacar el proyecto adelante.
La única posibilidad que existía, entienden desde las oficinas, para que no continuara el actual cuerpo técnico sería que ellos mismos solicitasen no seguir, si la situación les resulta insostenible.
Es habitual los lunes que los gestores y los integrantes del cuerpo técnico -Juanjo siempre acude ese día- se encuentren en el estadio y charlen. La conversación de ayer duró más de lo habitual tras el mazado sufrido ante el Rayo Vallecano. Ambas partes hablaron de la parcela deportiva y Juanjo recibió la comprensión de los actuales dirigentes. Por su parte, el técnico asturiano les trasladó su convencimiento y motivación para sacar al equipo de la crisis deportiva en la que vive actualmente. Y es que aunque el sentir de los aficionados invita al cambio de entrenador, desde las oficinas no están por la labor.
Tras la llegada de los administradores, la política de la austeridad ha sido el denominador común en todas las facetas de la entidad. Fueron ellos los que solicitaron insistentemente a Juanjo González, Fede Castaños y Pablo Pinillos que continuasen en el cargo, que en principio era transitorio, hasta final de temporada. Además, les aseguraron que seguirían al frente del equipo independientemente de los resultados. Por su parte, el trío técnico, en un ejercicio de responsabilidad, aceptó el difícil encargo aun a sabiendas de que Juanjo González, primer entrenador, no gozaba del apoyo de los aficionados. El sábado, tras la derrota ante el Rayo Vallecano y con el equipo una jornada más en zona de descenso, el runrún de una posible destitución comenzó a sonar, pero más en la grada que en los despachos.
En ningún momento los administradores se han planteado cambiar de entrenador. En las arcas del club no hay dinero suficiente para ello. Serán González, Castaños y Pinillos los que reciban al Barcelona el próximo domingo.
Fuente: El Diario Montañés