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El Racing consiguió ante el Villarreal una victoria balsámica que ha hecho que la semana haya sido mucho más dulce que las anteriores. Con el triunvirato ya consolidado en el banquillo los jugadores se han olvidado por unos días del lío institucional que persigue a la entidad y que últimamente ha robado todo el protagonismo a la parcela deportiva. Ayer, los jugadores volvieron a reír sobre el terreno de juego e incluso gastaron bromas. Antes de empezar a entrenar, pusieron la moto del doctor ceballos sobre el césped de entrenamiento. Luego, le dieron el casco para que él mismo la retirara.

Y es que la semana ha sido más tranquila que las anteriores. La plantilla ha disfrutado de dos días de descanso para afrontar el próximo encuentro, que adquiere la categoría de derbi, ante el Athletic. Sólo las lesiones de Bernardo, Arana, Picón y Mario trastocaron los planes del triunvirato. Sin embargo, la fortuna se ha aliado con los dos primeros que tienen muchas opciones de poder jugar mañana. Si el colombiano y el sevillano son capaces de realizar todo el entrenamiento de hoy y si sus sensaciones son buenas, podrán estar listos para medirse a los rojiblancos.

Juanjo González se mostró ayer optimista a este respecto. «Los que más difícil lo tienen para llegar son Picón y Mario. El resto creeemos que pueden estar listos. Habrá que ver como evolucionan mañana (por hoy)», aseguró el técnico asturiano nada más concluir el entrenamiento. A diferencia de otras ocasiones, esta vez el cuerpo técnico confía en que ambos se puedan recuperar y así no modificar el esquema de juego, que podría ser el mismo que consiguió que la segunda victoria de la temporada. La moral está a tope, sobre todo tras una semana de paz institucional. «No se ha hablado de otra cosa que no sea de la 'batalla' de Bilbao y eso es positivo», aseguró Juanjo.

«Tremenda intensidad»

Aunque desde Bilbao el enfrentamiento no se ve como algo más que tres puntos, desde la capital cántabra se sueña con que una victoria ante el eterno rival acabaría por cargar las pilas de una plantilla no demasiado acostumbrada al optimismo esta temporada. Sin embargo, para conseguir este objetivo, el Racing deberá estar atento a los veinte primeros minutos del partido donde el Athletic es contundente. «Tenemos claro que ellos vana a salir a apretar, a 'morder' y con una tremenda intensidad», advirtió González, que también recordó que «el ritmo será diferente al del sábado pasado».

Y es que Bielsa ha conseguido conjuntar a su equipo, donde Llorente sigue siendo uno de su principales referencias. «Ellos cambian bastante dependiendo de si está o no (Llorente), pero nosotros no lo haremos aunque sabemos que es un futbolista determinante», explica el técnico del Racing.

Por eso, quiere continuar con la misma defensa que permitió que Toño no recibiera ningún gol ante el conjunto castellonense. Así que, el entrenador está pendiente de la evolución de las dolencias de Bernardo que, si hoy no pasa nada raro, podrá jugar, ya que a Juanjo considera que el colombiano «rindió a buen nivel». Si no se recupera a tiempo, Christian será su sustituto. El que no estará para jugar noventa minutos, una semana más será Acosta. «No ha podido seguir el ritmo del grupo. Tiene unas ganas tremendas de ayudar pero no está con la capacidad suficiente para disputar el encuentro al mismo ritmo que sus compañeros. Además, a mí me miente porque siempre me dice que está bien», dijo.

 Fuente: El Diario Montañés