Noticias del Real Racing Club

La dimisión del consejo con el presidente a la cabeza, la renuncia del entrenador, el insoportable ambiente institucional, las lesiones, los malos resultados y, de todo esto anterior derivado, el negro horizonte que se otea desde los ventanales de El Sardinero, han dejado en él los mismos estigmas que en el resto de sus compañeros. «Está siendo muy duro», dice. Pero, como a los demás, las sensaciones recogidas del partido contra el Villarreal (más que la victoria) le han ayudado a recuperar la fe. «Miremos sin miedo hacia adelante; aún podemos revertir la situación», apuesta.

El argentino Lautaro Acosta, para quien ese último partido supuso no sólo un punto de apoyo colectivo sino también individual -reapareció esa tarde tras haber permanecido dos meses largos ausente por lesión- ultima esta semana su puesta a punto «loco por ayudar» a sus compañeros a salir del atolladero deportivo en el que el equipo se ha metido.

«Voy bien, aunque para 90 minutos no estoy», dice el 'Laucha', que entendería «muy precipitada» su incorporación al equipo titular ante el Athletic. «Voy poco a poco. Me conformo con unos minutos. Como ante el Villarreal», admite. «No quiero forzar porque me siento bien, la rodilla ya no se inflama, pero no lo suficiente como para jugar un partido entero».

Sean 90, 40 o 7 minutos, el delantero quiere «ayudar» a un equipo que ve muy comprometido. «Con todos los problemas por los que atraviesa, el sábado consiguió una victoria importantísima que demuestra que todavía está vivo, que va a pelear hasta el último día, que no se resigna a su suerte y que no se da por vencido».

Algo que el 'Laucha' valora considerando la «mala semana» pasada. «La derrota en Mallorca, la dimisión del 'míster', las noticias que venían del club, todas negativas... Esos fueron unos días muy malos» a los que la plantilla contestó con una victoria de efectos casi terapéuticos, porque los jugadores están «muy animados y con mucha confianza», dice Acosta.

Falta gol

Que por si no ha tenido pocos problemas, ahora enfrenta uno nuevo. La alarmante falta de gol del equipo -al que ni Ariel ni Stuani han podido aportar más que un par de goles por barba- ha convertido al ariete argentino en la esperanza de la afición, que esperaba su regreso como agua de mayo pensando que, con el exsevillista al ataque, los problemas goleadores del Racing se van a solucionar.

Una responsabilidad frente a la que Lautaro Acosta no se arruga: «Entiendo que la gente esté ilusionada con mi regreso y agradezco mucho el apoyo que me está dando, pero comprenderá que no voy a traducir esos ánimos en presión. No. No me siento preocupado», asegura el ariete sudamericano, que no promete goles sino trabajo. «Luego, Dios dirá si ese trabajo viene acompañado con goles».

Goles. Algo de lo que ha hablado, y mucho, con Stuani y Ariel: «¡Claro! No convertimos como queremos y estamos preocupados, aunque, a decir verdad, pienso que esa es una responsabilidad grupal. Al menos hasta ahora nos ha costado mucho llegar arriba», explica. «Los delanteros no estamos acertados, pero tampoco hemos tenido muchas ocasiones para estarlo», concluye el 'Laucha, que entiende que ni él ni Stuani ni Ariel deben obsesionarse pues eso no ayuda: «Aunque sepas que no eres el único culpable de que no haya goles, te entra ansiedad y no es bueno», advierte Acosta, que confía en que la nueva manera de jugar del equipo, con las líneas más adelantadas, y el renovado ánimo de sus compañeros redunden en el gol.

Fuente: El Diario Montañés