Noticias del Real Racing Club

Un empleado de Credit Suisse en Londres, Sebastian Shaefer, reconocido por la Autoridad de Servicios Financieros como una persona autorizada para la relaci?n con los clientes del banco de inversi?n suizo habr?a despejado las dudas sobre la solvencia de Ahsan Al? Syed. Su informe sobre las compa??as creadas por Syed en las que aparece como ?nico accionista, no ha sido divulgado, aunque estaba en juego el dinero de los contribuyentes c?ntabros. Sin embargo, habr?a convencido a los antiguos propietarios del Racing y al Gobierno regional de que dejan al club en manos de una persona con los recursos suficientes.

Las dudas sobre su solvencia surgieron de informaciones publicadas en la prensa brit?nica e india sobre su pasado y, tambi?n, del contraste entre la publicidad de Western Gulf Advisory y algunos datos que aparecen en una pesquisa superficial de documentos p?blicos.

La estructura societaria de WGA es compleja. Su cuartel general est? en el distrito financiero de Manama, la capital de Bahr?in, donde Syed tiene registrada una compa??a investigada el pasado a?o por las autoridades locales por un posible incumplimiento de su licencia. WGA, B.S.C es una compa?ia 'cerrada', seg?n la expresi?n legal utilizada en el Emirato, que tiene por tanto un n?mero permanente de socios: el propio Syed y la presencia nominal de otra persona que ofrecer la conexi?n local, y que no tiene permiso para administrar fondos de terceros. Esa compa??a matriz es ?una entidad separada de sus negocios europeos, que son responsables de la ejecuci?n de sus inversiones?, seg?n declar? WGA en septiembre.

La memoria anual de la compa??a en 2009, que hab?a pasado de un negocio de 25 millones de d?lares para convertirse en uno con liquidez superior a los 800, inquiet? a las autoridades. La explicaci?n parece estar en el pr?stamo de 1.000 millones sin inter?s que el propio Syed dio a la empresa, de tal modo que no se incumpl?an los estatutos con su limitaci?n para gestionar fondos propios. Los negocios se habr?an realizado desde Suiza, donde WGA se registr? a finales de 2008. El organismo regulador del cant?n de Zug no tiene competencia para supervisar empresas financieras que no reciben dep?sitos de clientes.

Negocios por medio mundo

Pero Western Gulf Advisory se inscribi? en el r?gimen autorregulador voluntario de PolyReg, que le obliga a una declaraci?n de cumplimiento de un c?digo de conducta y a presentar referencias sobre la buena reputaci?n de directivos y empleados, con el fin exclusivo de evitar el lavado de dinero.

Seg?n Syed, la compra del Racing se lleva a cabo a trav?s de una nueva sociedad, creada hace cuatro meses en Amsterdam, y de la que ?l es su ?nico accionista. WGA Sports Holdings, registrada cuando Syed pretendi? sin ?xito adquirir el club ingl?s Blackburn Rovers, no ha tenido actividad conocida.

WGA ha constituido sociedades en Reino Unido, Canad?, Hong Kong, Malasia y ha declarado negocios tambi?n en otros pa?ses: minas de caucho en Malasia, residencias de la tercera edad en Australia, inversiones inmobiliarias en Irlanda. En p?ginas especializadas de internet anuncia su oferta universal de pr?stamos o para adquirir minas de hierro en Sud?frica, Canad? o Brasil. Tambi?n ha anunciado colosales planes de inversi?n. Mil millones de d?lares en Australia, como parte de un plan de despegue internacional de WGA.

La emergencia de Al? Syed como comprador y prestamista en todo el mundo ha provocado, inevitablemente, la curiosidad sobre el origen de su fortuna, que ?l cifra en unos 8.000 millones de d?lares, producto de a?adir r?ditos a una notable riqueza familiar. Pero su relativamente modesta vivienda en Hyderabad y algunas las informaciones locales revelan un origen que no parece corresponder con semejantes activos.

?C?mo ha acumulado el abogado Syed esta fortuna sin dejar un notable rastro p?blico? ?Por qu? es gestionada por licenciados recientes con escasa experiencia profesional? Su emergencia como billonario se produce en 2010 y adquiere notoriedad con el f?tbol. Su oferta de compra del Blackburn Rovers llev? a la prensa inglesa a investigar su pasado. Hall? un reguero de peque?as deudas, negadas por Syed, y una reconocida a un tribunal que le mult? con algo m?s de 70.000 euros. En Hyderabad dej? unos 80.000 de deuda en el negocio de pr?stamos informales, aunque documentados, en el que tambi?n ejerci? su padre.

Pero estas cantidades son menores de las que Syed prometi? a las chicas del coro de la catedral de Blackburn (145.000 euros) y a un centro de acogida de j?venes sin casa (46.000), y de las que ya ha pagado 75.000. El propietario del Racing declara tambi?n que sus creencias excluyen la inversi?n en negocios de apuestas, alcohol o tabaco. Ali Syed ha asociado WGA a los premios de la prestigiosa revista 'The Banker' y ha relacionado su firma con carreras de coches y en torneos de f?tbol playa. Tambi?n ha anunciado el patrocinio de la selecci?n nacional del Emirato, en un acuerdo que le vincula con un miembro de la familia real, el jeque Salman Bin Ibrahim Al Jalifa, presidente de la federaci?n.

Fuente: El Diario Monta??s