La imagen de Cornellá es la imagen de dos futbolistas del Racing abrazados en el centro del campo, felices, sonrientes. Eran Pedro Munitis y Sergio Canales. Munitis, a sus 34 años de edad, representa el pasado y el presente del Racing. Él es el emblema de la afición, la esencia del racinguismo, el capitán del equipo. Sergio Canales, a sus 18 años, representa el presente y el futuro del Racing. Es la gran esperanza del cuadro cántabro, la joya de la cantera, el futbolista por el que el consejo de administración del club debe luchar para mantenerlo en Santander y que no se marche a otro equipo a triunfar. Ambos se fundieron, felices, sonrientes, eufóricos, tras el segundo gol ante el Espanyol para poner imagen a la victoria que, por fin, consiguió ayer el Racing.
Un triunfo vital para un equipo que lo necesitaba como el comer. No sólo por los tres puntos que suma el Racing (no le permiten abandonar todavía la zona de descenso a Segunda División), sino por el efecto moral que esta gran victoria puede tener en la plantilla. Una goleada que debe servir a todo el estamento y todo el entorno para darse cuenta de que hay equipo para mantenerse con suficiencia y tranquilidad en la máxima categoría del fútbol español.
El triunfo de ayer ha devuelto la sonrisa al Racing y ha permitido que Francisco Pernía respire aliviado al ver cómo la apuesta que realizó con el regreso de Miguel Ángel Portugal empieza a dar sus frutos. Sólo basta con ver el rostro de los jugadores tras los goles, la rabia con la que los celebraron, y la fiesta final en la que participaron hasta los integrantes del banquillo.
El Racing ha encontrado por fin el camino. Pero hay que tener cuidado. La euforia no es buena consejera, ni para Canales, ni para el equipo, ni para el Racing. La remontada no ha hecho nada más que comenzar. Ahora, queda culminarla con triunfos en El Sardinero, la gran asignatura pendiente.
Seguro que más de uno pensó en el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, cuando Henrique anotaba el primer gol del partido, el que abría la goleada del Racing en Cornellá ante un Espanyol moribundo, acorralado por las críticas de su afición. Henrique fue uno de los criticados por el jefe del Gobierno cántabro y ayer se reivindicó con su gol y con el éxito que supone para el Racing haber mantenido la portería a cero por vez primera en la temporada.
Pero junto a Henrique ayer también surgió con fuerza la figura de Miguel Ángel Portugal, al que hay que darle gran mérito en la victoria del Racing. Al técnico burgalés le han bastado dos semanas de trabajo para darse cuenta del gran protagonismo que puede tener Canales en este equipo, escaso de futbolistas con talento para desequilibrar un partido.
Portugal también se atrevió a salir de ese 4-4-2, a rectificar la posición en la que colocó al canterano en el partido ante el Osasuna y a situarle en la media punta, el lugar en el que mejor se desenvuelve el jovencísimo jugador. ¡Por fin alguien que lo ha visto!
El encuentro
El partido en sí tuvo dos partes totalmente opuestas. En la primera mitad, el Racing fue dominado con claridad por el Espanyol, pese a que la ocasión más clara la tuvo cerca del descanso Tchité. El congoleño, inexplicablemente, echó el balón por encima de la portería de Kameni, solo, en el área pequeña. Ver para creer.
Pese a su poco fútbol, el Racing supo estar fuerte en defensa. Tan sólo concedió una jugada de gol al Espanyol, que Callejón, también completamente solo ante Toño, envío muy desviado. En la segunda parte, todo cambió. El Racing se encontró con el gol de Henrique de salida (falta que saca Canales y el brasileño remata a placer de cabeza) y a partir de ahí dio una lección de cómo se debe jugar al contragolpe, con velocidad y verticalidad. Incluso, hubo momentos para el lucimiento, con jugadas al primer toque en el centro del campo que levantaron los olés de los aficionados cántabros presentes en Cornellá. Canales, tras un buena jugada de Munitis, hizo el segundo. Tchité, al transformar un penalti cometido sobre Serrano, el tercero. Y el propio canterano redondeó el festival cántabro con el cuarto tras un servicio de Serrano.
Espanyol: Kameni; Pillud, Pareja, Víctor Ruiz, Chica; Baena (Iván Alonso, min.53), Forlín; Corominas, Luis García (Nakamura, min.53), Ben Sahar (Tamudo, min.62); y Callejón.
Racing: Toño; Morris (Oriol, min.62), Henrique, Torrejón, Christian; Colsa, Lacen; Munitis, Canales (Luis García, min.72), Serrano (Arana, min.79); y Tchité.
Goles: 0-1, min.47: Henrique; 0-2, min.52: Canales; 0-3, min.66: Tchité (p); 0-4, min.72: Canales.
Árbitro: Carlos Delgado Ferreiro (comité vasco). Amonestó a Morris (min.33), Óscar Serrano (min.43), Tchité (min.58), Colsa (min.73), Forlín (min.74) y Víctor Ruiz (min.88).
Incidencias: partido correspondiente a la decimotercera jornada de Liga disputado en el estadio RCDE de Cornellà-El Prat ante 25.180 espectadores
Fuente: El Diario Montañés