Domingo, 23 de agosto de 2009
Un triunfo para cerrar la pretemporada
El Racing volvió al atractivo y modélico estadio de Baracaldo para adjudicarse la victoria y, por lo tanto, la cuarta edición del Trofeo Lasesarre, Ilustre Ayuntamiento de Barakaldo. Con 1-0 a su favor, merced al gol de Luisma, al filo del descanso, y el gol de Brian Sarmiento a poco de comenzar el segundo periodo, los racinguistas cerraron en la cancha vizcaína una buena pretemporada.
Esta vez tenían enfrente a un rival totalmente renovado en relación con el que la campaña pasada se enfrentaba al filial verdiblanco en la Liga de Segunda B. Mandiá apostó por una nueva prueba. Presentó una formación 'cóctel' entre jugadores contrastados (Torrejón, Pinillos, Lacen, Moratón) y mayoría de nuevos valores, empezando por el guardameta cántabro Mario Fernández y terminando por el valor argentino Brian Sarmiento.
Tardó algunos minutos el Racing en hallar el ritmo de juego deseado y cuando lo consiguió acabó, ya al borde del intermedio, encontrando el premio a la mejoría técnica y táctica. De salida el Barakaldo pareció más conjuntado y hasta cómodo, dando opciones de ataque. Así, en el minuto 3 Asier Fernández lanzó duro y raso desde el exterior del área y Mario desvió a córner. Algunas otras aproximaciones más demostraron que los gualdinegros eran rivales a tener en cuenta.
Decisión sorprendente
Tuvo mérito la cualidad racinguista de sobreponerse y dar vuelta al desarrollo del choque. El árbitro tomó, en el minuto 29, una decisión sorprendente. Aconsejó el cambio de Geijo y Elorriaga, que venían de un incidente con choque incluido, en lugar de expulsarles. Así lo hicieron los entrenadores y a partir de entonces se calmaron los ánimos y el Racing fue a más. Organizado, con toque, aperturas por las bandas, cruces y afán ofensivo, fue en busca de la victoria y tomó el mando del encuentro.
La segunda mitad comenzó con más cambios. Torrejón y Moratón dejaron sus plazas a los canteranos Picón y Osmar, y Lacen a Colsa. El Barakaldo siguió con su previsible cuadro titular. Las variaciones apenas alteraron el esquema, salvo cuando entró Christian por Canales, momento en que Juan Luis dejó la zaga para acceder a la posición de interior izquierdo.
Durante todo el periodo el Racing mantuvo el control del choque. No abundaron los lances de gol, pero sí las jugadas que pretende Mandiá, esto es, avances abiertos, toque rápido y certero, apoyos, vocación ofensiva y riesgo, como el corrido en el minuto 65 que llevó a Negredo, hermano del ariete sevillista, a quedarse sólo ante Mario y despejar, pleno de reflejos, el joven meta cántabro.
Al término del choque, Mandiá aseguró que «siempre es positivo conseguir una victoria para adquirir confianza, pero no podemos olvidar que estamos en pretemporada. Lo más positivo es que cada vez se nota más que somos un equipo con espíritu, con corazón y que trabajamos y peleamos cada balón para intentar ganar el partido». Además, cuestionado sobre el gol del Racing, conseguido a balón parado, dijo que «las jugadas de estrategia son importantes porque creo que tenemos jugadores que pueden hacer daño en esa faceta».
Esta vez tenían enfrente a un rival totalmente renovado en relación con el que la campaña pasada se enfrentaba al filial verdiblanco en la Liga de Segunda B. Mandiá apostó por una nueva prueba. Presentó una formación 'cóctel' entre jugadores contrastados (Torrejón, Pinillos, Lacen, Moratón) y mayoría de nuevos valores, empezando por el guardameta cántabro Mario Fernández y terminando por el valor argentino Brian Sarmiento.
Tardó algunos minutos el Racing en hallar el ritmo de juego deseado y cuando lo consiguió acabó, ya al borde del intermedio, encontrando el premio a la mejoría técnica y táctica. De salida el Barakaldo pareció más conjuntado y hasta cómodo, dando opciones de ataque. Así, en el minuto 3 Asier Fernández lanzó duro y raso desde el exterior del área y Mario desvió a córner. Algunas otras aproximaciones más demostraron que los gualdinegros eran rivales a tener en cuenta.
Decisión sorprendente
Tuvo mérito la cualidad racinguista de sobreponerse y dar vuelta al desarrollo del choque. El árbitro tomó, en el minuto 29, una decisión sorprendente. Aconsejó el cambio de Geijo y Elorriaga, que venían de un incidente con choque incluido, en lugar de expulsarles. Así lo hicieron los entrenadores y a partir de entonces se calmaron los ánimos y el Racing fue a más. Organizado, con toque, aperturas por las bandas, cruces y afán ofensivo, fue en busca de la victoria y tomó el mando del encuentro.
La segunda mitad comenzó con más cambios. Torrejón y Moratón dejaron sus plazas a los canteranos Picón y Osmar, y Lacen a Colsa. El Barakaldo siguió con su previsible cuadro titular. Las variaciones apenas alteraron el esquema, salvo cuando entró Christian por Canales, momento en que Juan Luis dejó la zaga para acceder a la posición de interior izquierdo.
Durante todo el periodo el Racing mantuvo el control del choque. No abundaron los lances de gol, pero sí las jugadas que pretende Mandiá, esto es, avances abiertos, toque rápido y certero, apoyos, vocación ofensiva y riesgo, como el corrido en el minuto 65 que llevó a Negredo, hermano del ariete sevillista, a quedarse sólo ante Mario y despejar, pleno de reflejos, el joven meta cántabro.
Al término del choque, Mandiá aseguró que «siempre es positivo conseguir una victoria para adquirir confianza, pero no podemos olvidar que estamos en pretemporada. Lo más positivo es que cada vez se nota más que somos un equipo con espíritu, con corazón y que trabajamos y peleamos cada balón para intentar ganar el partido». Además, cuestionado sobre el gol del Racing, conseguido a balón parado, dijo que «las jugadas de estrategia son importantes porque creo que tenemos jugadores que pueden hacer daño en esa faceta».
Fuente: El Diario Montañés
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