Lunes, 23 de mayo de 2005
?Que acabe la Liga ya!
El Racing no tuvo en La Rosaleda ninguna opci?n de victoria en el partido de la pen?ltima jornada ante el M?laga. El resultado fue tan justo como previsible, pues la alineaci?n planteada por Nando Yosu marc? el devenir del encuentro. Los c?ntabros, con la mente puesta ya en el pr?ximo final del campeonato y faltos de intensidad pese a las numerosas caras nuevas del 'once' inicial, regalaron el centro del campo y el M?laga, con un Miguel ?ngel excepcional, se desped?a as? de su afici?n con tres nuevos puntos y la sensaci?n de haber cumplido durante la temporada.
Pese al leve dominio que ejerci? en el inicio del choque, el Racing mostraba aires de despiste. Permit?a a Duda tocar en exceso y esto precisamente ocasionar?a la primera jugada de claro peligro, pues la falta sacada por Gerardo llegar?a inmaculada a Baiano, que solo en el segundo palo mand? el esf?rico al segundo anfiteatro, desperdiciando as? el regalo de la zaga norte?a.
Yosu parec?a haber estudiado al rival y, conocedor del car?cter t?ctico de su hom?logo, Antonio Tapia, plante? el partido bajo las trincheras. La batalla en el centro del campo era continua, y un despiste pod?a decantar la balanza como as? ser?a. Miguel ?ngel logr? retener en la medular lo suficiente para ver y dejar el pasillo a Edgar, quien se plant? en un interminable mano a mano ante To?o, quien averigu? las intenciones del punta malacitano, pero su despeje sali? defectuoso y el bal?n se col? en las redes. Empezaba un nuevo partido.
Incomodidad
Prueba de que el encuentro no iba bien para los intereses racinguistas era la incomodidad que manifestaba Torrado quien no lograba aportar frescura en ataque y, adem?s, dejaba a Miguel ?ngel suelto con todo el tiempo para pensar y buscar la mejor opci?n. Tras el gol, volvi? a dejar a Edgar franco ante la porter?a rival, pero el brasile?o mostr? escasos recursos y desperdici? una nueva ocasi?n.
Las numerosas modificaciones realizadas en el once inicial por Nando Yosu desdibuj? el orden t?ctico santanderino, y las ocasiones del M?laga se repet?an. Jugadores de corte defensivo, como Gerardo, llegaban hasta la cocina, con mucho peligro. El lateral no marc?, pero fue por falta de entendimiento con el delantero Baiano. El dos a cero estaba tan cerca que casi se respiraba, y lo peor era que el Racing parec?a no encontrar soluciones a esta crisis temporal. El primer disparo con cierto peligro del Racing lleg? en el minuto 40. Torrado chut? muy alto, en una de las pocas opciones que se lleg? a las inmediaciones de la frontal malague?a con la posesi?n del bal?n.
El Racing adelant? sus l?neas tras el descanso, retir? a Jonatan y situ? a Aganzo en punta con Arizmendi. Esta decisi?n creaba m?s espacios al M?laga y multiplicaba el veneno en sus aproximaciones. Miguel ?ngel y Baiano dieron avisos, pero el Racing, con la temporada cumplida y con desventaja en el marcador, no ten?a nada que perder.
Intensidad del M?laga
La escasa tensi?n de los jugadores de ambas plantillas favorec?a un festival de f?tbol ofensivo, sobre todo por lo que al M?laga respecta. Al Racing no se le ve?a ansioso pese a ir perdiendo, y tocaba todo lo que pod?a, eso s?, con escasa mordiente. En el bando contrario, Baiano contaba con una nueva excelente ocasi?n para ampliar su cuenta anotadora particular, pero sob? demasiado el bal?n y la defensa c?ntabra se anticip? sin problemas.
Duda y M?chel creaban una sociedad perfecta, que siempre se iniciaba con varios regates por la izquierda del portugu?s y con remates a bocajarro de M?chel, que mostraba cierta ansiedad y enormes ganas de agradar.
El Racing, a falta de quince minutos para el final, se fue arriba sin mucho fundamento. Los espacios en el centro del campo eran verdaderas lagunas y Baiano se es propio en ?l. Tapia le hizo un regalo y le retir? a falta de diez minutos en sustituci?n de Amoroso. Ovaci?n en el tendido ante una despedida ya anunciada.
El final parec?a que ya llegaba. Ambos conjuntos ten?an la intenci?n de finiquitar un partido que no pasar? a la historia, pero un bal?n dividido en el centro del campo fue ganado por Amoroso, que recorri? cincuenta metros en solitario y marc? a placer ante un To?o que qued? vendido. Al final, una peque?a trifulca y un partido menos para dar carpetazo definitivo al campeonato. Todos contentos.
Fuente: El Diario Monta??s
Pese al leve dominio que ejerci? en el inicio del choque, el Racing mostraba aires de despiste. Permit?a a Duda tocar en exceso y esto precisamente ocasionar?a la primera jugada de claro peligro, pues la falta sacada por Gerardo llegar?a inmaculada a Baiano, que solo en el segundo palo mand? el esf?rico al segundo anfiteatro, desperdiciando as? el regalo de la zaga norte?a.
Yosu parec?a haber estudiado al rival y, conocedor del car?cter t?ctico de su hom?logo, Antonio Tapia, plante? el partido bajo las trincheras. La batalla en el centro del campo era continua, y un despiste pod?a decantar la balanza como as? ser?a. Miguel ?ngel logr? retener en la medular lo suficiente para ver y dejar el pasillo a Edgar, quien se plant? en un interminable mano a mano ante To?o, quien averigu? las intenciones del punta malacitano, pero su despeje sali? defectuoso y el bal?n se col? en las redes. Empezaba un nuevo partido.
Incomodidad
Prueba de que el encuentro no iba bien para los intereses racinguistas era la incomodidad que manifestaba Torrado quien no lograba aportar frescura en ataque y, adem?s, dejaba a Miguel ?ngel suelto con todo el tiempo para pensar y buscar la mejor opci?n. Tras el gol, volvi? a dejar a Edgar franco ante la porter?a rival, pero el brasile?o mostr? escasos recursos y desperdici? una nueva ocasi?n.
Las numerosas modificaciones realizadas en el once inicial por Nando Yosu desdibuj? el orden t?ctico santanderino, y las ocasiones del M?laga se repet?an. Jugadores de corte defensivo, como Gerardo, llegaban hasta la cocina, con mucho peligro. El lateral no marc?, pero fue por falta de entendimiento con el delantero Baiano. El dos a cero estaba tan cerca que casi se respiraba, y lo peor era que el Racing parec?a no encontrar soluciones a esta crisis temporal. El primer disparo con cierto peligro del Racing lleg? en el minuto 40. Torrado chut? muy alto, en una de las pocas opciones que se lleg? a las inmediaciones de la frontal malague?a con la posesi?n del bal?n.
El Racing adelant? sus l?neas tras el descanso, retir? a Jonatan y situ? a Aganzo en punta con Arizmendi. Esta decisi?n creaba m?s espacios al M?laga y multiplicaba el veneno en sus aproximaciones. Miguel ?ngel y Baiano dieron avisos, pero el Racing, con la temporada cumplida y con desventaja en el marcador, no ten?a nada que perder.
Intensidad del M?laga
La escasa tensi?n de los jugadores de ambas plantillas favorec?a un festival de f?tbol ofensivo, sobre todo por lo que al M?laga respecta. Al Racing no se le ve?a ansioso pese a ir perdiendo, y tocaba todo lo que pod?a, eso s?, con escasa mordiente. En el bando contrario, Baiano contaba con una nueva excelente ocasi?n para ampliar su cuenta anotadora particular, pero sob? demasiado el bal?n y la defensa c?ntabra se anticip? sin problemas.
Duda y M?chel creaban una sociedad perfecta, que siempre se iniciaba con varios regates por la izquierda del portugu?s y con remates a bocajarro de M?chel, que mostraba cierta ansiedad y enormes ganas de agradar.
El Racing, a falta de quince minutos para el final, se fue arriba sin mucho fundamento. Los espacios en el centro del campo eran verdaderas lagunas y Baiano se es propio en ?l. Tapia le hizo un regalo y le retir? a falta de diez minutos en sustituci?n de Amoroso. Ovaci?n en el tendido ante una despedida ya anunciada.
El final parec?a que ya llegaba. Ambos conjuntos ten?an la intenci?n de finiquitar un partido que no pasar? a la historia, pero un bal?n dividido en el centro del campo fue ganado por Amoroso, que recorri? cincuenta metros en solitario y marc? a placer ante un To?o que qued? vendido. Al final, una peque?a trifulca y un partido menos para dar carpetazo definitivo al campeonato. Todos contentos.
Fuente: El Diario Monta??s
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